TRIBUNA DEL PRESIDENTE DE SIGRE
Sostenibilidad y economía circular, prioridades para el sector farmacéutico
En un momento de inestabilidad global en el que se cierne una amenaza sobre algunas de las bases de los criterios ESG (como saben, siglas referidas a medioambiente, compromiso social y gobernanza), es más necesario que nunca apostar por el cuidado de nuestro entorno, del planeta en el que vivimos. Los cambios políticos y económicos en Estados Unidos han añadido una capa de complejidad al cumplimiento de las estrategias de sostenibilidad de las empresas.
Sin embargo, más allá del contexto geopolítico, no cabe duda de que la sostenibilidad y la economía circular son una prioridad para el sector farmacéutico. Un sector como el nuestro, firmemente comprometido con la salud, lo está también con el bienestar del planeta con el necesario enfoque One Health.
Y es que, parafraseando a Augusto Monterroso, “al despertar, la triple crisis planetaria (cambio climático, pérdida de biodiversidad y contaminación), todavía estaba allí”. Estos factores ambientales afectan sobremanera a los pacientes, el corazón y la razón de ser de todas nuestras operaciones.
En este escenario, SIGRE se erige como un actor fundamental en el desarrollo de soluciones sostenibles que permitan al sector avanzar en esta dirección.
El ecodiseño es un pilar fundamental para la economía circular en este sector. La elección de materiales más sostenibles, la reducción del peso de los envases y la mejora en su reciclabilidad son acciones que contribuyen a disminuir la huella ambiental de los productos farmacéuticos. SIGRE impulsa estas iniciativas a través del Plan Empresarial de Prevención y Ecodiseño (PEPE), que fomenta la adopción de soluciones innovadoras en los envases de medicamentos con el objetivo de minimizar su impacto ambiental.
Por otro lado, a través de SIGRE, se fomentan hábitos sanitarios saludables como la revisión periódica del botiquín doméstico, para reducir el peligro que puede suponer para nuestra salud el consumo de medicamentos sobrantes o caducados. Además, depositar los residuos de medicamentos en el Punto SIGRE evita la contaminación de nuestros ríos y suelos y permite reciclar los materiales de los envases para darles un nuevo uso, ahorrando el consumo de materias primas vírgenes.
El éxito de este sistema responde a la colaboración de todos los actores implicados en la cadena del medicamento: industria farmacéutica, distribución y farmacia.
A este compromiso se suma la reciente ampliación del ámbito de actuación de SIGRE, que desde el 1 de enero de este año abarca también la gestión de los envases comerciales e industriales de medicamentos. Este nuevo enfoque refuerza el compromiso del sector farmacéutico con la sostenibilidad y la economía circular, asegurando que todos los envases utilizados en la cadena de suministro farmacéutica sean gestionados de forma responsable y eficiente. Con esta ampliación, SIGRE impulsará al sector farmacéutico hacia una mayor circularidad para reducir el impacto ambiental de su actividad.
